Desayunos, arreglos y objetos únicos hechos a tu medida.
Desde pequeña, crecí junto a mi hermana en el almacén de mis abuelos, un lugar que marcó profundamente mi vida. Estar rodeada de clientes, ventas y ese ambiente tan familiar despertó en mí un gusto natural por el comercio, algo que siempre me ha resultado cercano y fácil de hacer.
En ese contexto, decidí emprender. Pensé: ¿por qué no crear un negocio que combine lo que me gusta con algo que pueda alegrar la vida de otros? Así nació Sorpresas Leonor, un proyecto que empezó como una curiosidad y hoy se ha transformado en una verdadera pasión.